Tras haber
sobrevivido al soponcio navideño, henos aquí de nuevo, dispuestos a olvidar
estos nefastos días en los que tan obligatorio es ser feliz y amar y comer,
(sobre todo) sin medida. Así que vamos a preparara una suave, ligera, deliciosa
y muy sencilla sopa de col lombarda, ese repollo de color púrpura, que no sólo es bajo en
calorías sino que nos aporta, vitamina C y ácido cítrico, mucha fibra y es además
fuente de antioxidantes. Lo que viene muy bien para aliviar a nuestro maltratado estómago.
Ingredientes
para 4 personas
Una lombarda
de unos 800 gr
Dos cebollas
rojas
3/4 litro de caldo de pollo
Sal
Cuatro clavos de olor
Cuatro clavos de olor
Aceite de
oliva
- Pelamos las cebollas, las cortamos en juliana fina y las ponemos a rehogar a fuego suave en una cazuela de barro con un chorro de aceite y un poco de sal.
- Mientras, lavamos la col, (quitamos el tronco blanco) la cortamos también en juliana fina y la ponemos a hervir cubierta de agua y con un poco de sal hasta que esté tierna; unos veinte minutos bastarán. Escurrimos y reservamos.
- Cuando la cebolla esté bien pochada, trasparente pero sin que se haya dorado, escurrimos del aceite sobrante, añadimos la lombarda y mezclamos bien, rehogando un par de minutos más.
- Añadimos el caldo de pollo, los clavos de olor y dejamos hervir cinco minutos, corregimos de sal y servimos bien caliente.