23 de enero de 2012

Alitas de pollo con salsa de tomate y rabanitos.

Confieso mi especial predilección por las alas de pollo. Su carne es tan suculenta, tierna y jugosa que resulta apta para hacer multitud de recetas desde croquetas a deliciosas sopas. Pueden prepararse asadas, fritas, hervidas, acompañadas de cualquier salsa… En la entrada de las croquetas en este mismo blog ya daba la dirección donde se podía ver el despiece del pollo y la división de las alas. Hoy utilizaremos la parte del jamoncito para esta sencilla pero apetitosa  preparación. No se alarme por la cantidad de alitas necesarias. En primer lugar, ya queda dicho, vamos a utilizar sólo la parte llamada jamoncito. Además, son tan pequeños (y sobre todo tan ricos) que seguro que no sobrará. Y en cualquier caso pueden guardarse, el pollo frío está igual de bueno  y va muy bien como una original tapa para acompañar una copa o una cerveza.

Ingredientes para cuatro personas       

24 alitas de pollo
Una taza grande de salsa de tomate
250 gramos de rabanitos
Dos cucharadas de estragón picado
Un vaso de brandy
Dos hojas de laurel
Sal
Pimienta

Para comenzar recortamos las alitas quitándoles las puntas, que desecharemos,  y separando el muslito del resto que guardaremos para otras preparaciones, (se pueden congelar) como por ejemplo estas deliciosas croquetas. A  continuación las salpimentamos,  las ponemos en una fuente honda y las cubrimos con un marinado hecho con el brandy y el estragón. Si no dispone de estragón fresco puede usarse seco. En este caso muélalo un poco con el mortero.  Dejamos en adobo durante al menos cuatro o cinco horas, aunque es mejor preparar la noche anterior. 

Lavamos muy bien y pelamos los rabanitos que pondremos a asar envueltos en papel cebolla, con el horno a unos 180º, unos treinta-cuarenta minutos, pero vigile y sobre todo fíese de su propia experiencia con su horno. Cuando ya estén, apartamos algunos para adornar los platos, trituramos el resto y salpimentamos. Mezclamos con la salsa de tomate en iguales proporciones y reservamos. Colamos el marinado, limpiamos los trozos de las alitas con un paño y las colocamos en una fuente  con las hojas de laurel, las regamos con parte del brandy del  marinado, y las ponemos al horno, precalentado a 180º durante 45 – 60 minutos, regándolas de tanto en tanto con lo que queda del marinado. A media cocción las embadurnamos con la salsa de tomate y rabanitos y dejamos que acaben de hacerse dándoles vuelta de tanto en tanto hasta que estén tiernas. Al servir, adornar el plato con uno o dos de los rabanitos asados abiertos en cruz.