En su novela
Deja en paz al diablo (Let the Devil Sleep, 2012, editado por
Roca Editorial en traducción de Javier Guerrero) el escritor estadounidense John
Verdon hace que uno de sus personajes prepare un arroz con gambas, verduras
y anacardos con una mezcla muy sugestiva de especias. No da la receta, en
realidad, sino que como telón de fondo de la acción, narra cómo Madeleine va
preparando la cena. Eso, y el hecho de que la combinación de ingredientes
resulte en principio muy atractiva, me sugirió la idea de poner en práctica ese
arroz. Hay más indefinición y literaria vaguedad que explicación clara para
prepararlo, como cuando asegura que Madeleine ralla las cebolla sobre el arroz
después de haberlas salteado (?) o no
indica si pone el arroz en crudo en el horno... en fin, que la tentación de
enmendarle la plana a Mr. Verdon era difícil de resistir. Y siguiendo el sabio
consejo de Epicuro, creo,
cuando decía Apresurémonos a sucumbir a
la tentación antes de que se aleje, aquí está mi versión de este, os lo
aseguro, riquísimo arroz.
Ingredientes
para cuatro personas
400 gr de
arroz
200 gr de
gambas
Una cebolla
roja
Medio
pimiento rojo
Medio
pimiento verde
Una rama de
apio
Dos dientes
de ajo
1/2
cucharadita de jengibre en polvo
Cuatro
vainas de cardamomo
Una
cucharada de cilantro picado
Una taza de
las de café de anacardos
Mantequilla
para untar la cazuela para el horno
Sal
Aceite de
oliva
- Preparamos un recipiente que pueda ir al horno y lo untamos ligeramente con mantequilla.
- Pelamos las gambas y preparamos un caldo, hirviendo durante tres o cuatro minutos las pieles y las cabezas.
- Colamos el caldo y hervimos en él el arroz durante ocho minutos a fuego medio (Dos medidas de caldo por cada medida de arroz.) Apagamos el fuego y retiramos. Si queda muy caldoso, dejamos unos minutos para que empape un poco. Vertemos en la fuente para el horno.
- Cortamos la cebolla en juliana gruesa y la salteamos cinco o seis minutos en una sartén con un chorro de aceite de oliva. Retiramos escurriendo el exceso de aceite, la trituramos con la batidora y añadimos al arroz.
- Cortamos en juliana gruesa los pimientos y el apio y los salteamos unos cinco o seis minutos junto con las gambas y los ajos pelados y lo añadimos al arroz después de escurrir el exceso de aceite.
- Trituramos un poco los anacardos en el mortero y en una sartén con un hilo de aceite los tostamos ligeramente junto con las especias y el cilantro picado. Del cardamomo usaremos sólo las semillas que hay en el interior de las vainas. Añadimos al arroz.
- Mezclamos bien todos los ingredientes que ya tenemos en la cazuela y los llevamos al horno, que tendremos precalentado a 180 º, hasta que el arroz quede a nuestro gusto, dependiendo del horno, unos ocho o diez minutos.
- Servir, y a disfrutar.
Hola Salvador, yo también tengo un blog de cocina y me encanta el cine gastronómico, me quedo de seguidora y si tienes un hueco pásate por mi blog , tengo una pestaña con las mejores películas de cine gastronómico.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
Con mil sabores
Estupenda receta, me la acabo de apuntar para hacerla. El arroz en sus mil formas de preparación es tan agradecido que tú has sabido sacarle partido a una escena relatada en un libro. Te felicito.
ResponderEliminarUn abrazo